Con una Eucaristía campal en el
municipio de la Concordia en Jinotega fieles vivieron el Jubileo de los
enfermos decretado por el Franciscano Monseñor Carlos Herrera, Obispo de
Jinotega.
Doña Marta Blandón, llegó
desde la comunidad de la colmena para “vivir la presencia de la Virgen que
peregrina por nuestras tierras y pedirle por las necesidades” dijo la mujer con
voz entre cortada y con mirada serena.
Monseñor Herrera, acompañado
de sacerdotes de la zona 3 de la Diócesis de Jinotega presidió la Eucaristía,
en su homilía habló sobre las apariciones de Nuestra Señora de Lourdes, titular
de este municipio y patrona de los enfermos.
“La Virgen María, es esperanza
de los nicaragüenses, es reina de la paz, como buena madre siempre ha acompañado
al hombre en el camino de la salvación, cuatro años después de haber proclamado
el dogma de la Inmaculada Concepción se le apareció a una niña de catorce años,
a Santa Bernardita, luego en un momento difícil de la historia se les aparece a
tres pastorcitos para lograr el cese de la guerra y la paz del mundo” expresó
el episcopo.
Monseñor Herrera reflexionó en
torno a la paz y dijo que “en nuestra sociedad estamos sedientos de una
verdadera paz, que debe ser fruto de la justicia y el perdón, vemos como el
Señor ha querido poner en las manos de su madre las riquezas en los que los
hombres debemos de meditar, las apariciones de la Virgen son una llamada de
Dios, ella se muestra como consoladora de los afligidos” meditó.
Al concluir la Eucaristía sacerdotes
Concelebrantes realizaron la unción de enfermos a un centenar de fieles
asistentes a la acción litúrgica y se llevó a cabo la veneración de la Imagen
Peregrina de Nuestra Señora de Fátima.
0 Comentarios